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No tener deudas pendientes puede ser una condición en alguna comunidad autónoma que restrinja a los trabajadores por cuenta propia a acceder a las ayudas directas. Sectores como la hostelería y el comercio muestran su indignación ante esta situación
Son siete el número de Comunidades Autónomas que ya permiten solicitar las ayudas directas, y a su vez, han establecido como requisito que dicha prestación a los negocios afectados por la crisis tenga como fin exclusivo pagar las deudas pendientes. Es decir, en el caso que un autónomo no mantenga deudas con sus proveedores, este no podrá acceder a las ayudas directas.
El colectivo de los autónomos ha calificado el requisito como «indignante» e «inexplicable». Creen que es injusto que los negocios que hayan estando cumpliendo con sus proveedores durante toda la pandemia, no pueda acceder a la prestación en este momento a pesar de sus elevadas caídas en la facturación y cumplir con las demás condiciones de acceso a las ayudas.
Este requisito surge a partir de una serie de instrucciones de Hacienda para que las Comunidades Autónomos opten por una interpretación más restrictiva, a pesar de no ser una condición que aparece literalmente en el Real Decreto-Ley 5/2021. Sin embargo, cada apartado incluido en el Real Decreto debe ser interpretado por los funcionarios de las administraciones regionales para luego poder ser aplicados.
Es por eso por lo que «las autonomías que están abriendo convocatorias se están curando en salud y están aplicando las interpretaciones más restrictivas en las condiciones cuya redacción genera confusión», explicó el director del Área Jurídica de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, José Carlos Piñero.
Ya son seis las Comunidades Autónomas que han impuesto dicho requisito, algo que indigna a la mayoría de los sectores. Por ejemplo, más del 90% de los taxistas podrían quedar directamente excluidos de las ayudas por estar al corriente de pago con sus proveedores y no haberse saltado la Ley de Morosidad.
El sector turístico muy afectado por la restricción
El sector turístico solicitó al Ministerio de Hacienda que hiciera pública la instrucción a las autonomías para que estas limiten el acceso a las ayudas, y así poder presentarla a los tribunales.
«De momento, todavía no hemos recibido respuesta. Pero sí sabemos con seguridad que cientos de autónomos y empresarios al frente de agencias viaje han sido éticos y profesionales y han intentado pagar por todos los medios a sus proveedores. Y, por el momento, ese simple motivo va a hacer que en muchos casos no cobren nada», subrayó Cesar Gutiérrez, presidente de FETAVE -Federación Empresarial de Asociaciones Territoriales de Agencias de Viajes Españolas.
Gutiérrez, por su parte, quiso añadir acerca de los autónomos al frente de las agencias de viajes «creen que lo más importante es pagar a sus proveedores. Todos estos que lo han hecho bien, se quedan sin ayudas por una interpretación a última hora del Ministerio de Hacienda. El problema es que ya son seis comunidades en las que no sólo habrá autónomos que soliciten las ayudas y no tengan facturas pendientes con las que justificar el dinero recibido, sino que además muchos directamente no lo van a solicitar por no tener suficientes deudas sin pagar. Y ese es el verdadero problema, porque si más adelante cambia el criterio, estos negocios que lo hayan solicitado tampoco tendrán la oportunidad de cobrar un dinero que les correspondía».
Además, piensa que la medida es «decepcionante, porque se prometió unas ayudas que están muy alejadas de las que han acabado siendo, es también incoherente. Habrá empresas que hayan pedido un ICO y se hayan ido con el dinero de viaje o se lo hayan gastado en cualquier cosa que no tiene que ver con el negocio y puedan recibir ayudas, porque no se está pidiendo la justificación de los préstamos. Sin embargo, un autónomo que se ha arruinado en estos meses, no va a ver ni un euro si ha pagado lo que debía», comentó Gutiérrez.
El presidente de FETAVE concluyó con que las ayudas son necesarias «para salir adelante, no nos soluciona nada que nos quiten un préstamo que se paga a muchos años vista, necesitamos dinero para subsistir. De por si, la concepción de las ayudas es decepcionante, pero todavía peor es que aquel empresario al frente de una agencia de viajes, que lo ha pasado tan mal durante este último año, que además ha hecho los deberes, no vaya a ver ni un euro de los fondos».
Más del 90% de los taxistas excluidos
El colectivo de los taxistas ha sido uno de lo mayores afectados por las restricciones para frenar la pandemia. El confinamiento les costó unas perdidas del 90% respecto al 2020, y a día de hoy siguen sin recuperarse del todo.
Después del duro tramo que han pasado desde el sector, esta nueva restricción supone un obstáculo más para el colectivo. «Ahora nos dicen que no sólo hay que cumplir los requisitos de facturación y viabilidad, sino que también hay que tener deuda pendientes de 2020 para poder cobrar unas ayudas que llevamos desde el año pasado reclamando. Los taxistas están indignados» comentó Miguel Ruano, presidente de FAAT -Federación Andaluza de Autónomos del Taxi-.
Uno de lo problemas que destacan desde la federación, es que los taxistas no suelen mantener deudas en su día a día: «nuestros gastos mensuales se basan en carburante, seguros y pagos de impuestos y cotizaciones, que no se pueden dejar a deber. Y las mayores deudas de los taxistas son por el vehículo y la compra de la licencia, y esas deudas, en la inmensa mayoría de los casos, no vienen de 2020, sino de antes» subrayó Ruano.
Indignación en el sector hostelero
Los hosteleros califican como «incoherente» restringir a los negocios que han vendido gran parte de su patrimonio para poder seguir al corriente de pagos con sus proveedores. Hay constancia que muchos hosteleros han vendido su segunda vivienda para cumplir con sus obligaciones: «se van a quedar fuera, sólo por ser decentes».
«Después de meses pidiendo un plan de rescate al sector, y ayudas directas, el Gobierno penalice con un criterio que no tiene sentido a quienes han vendido su patrimonio para tener sus cuentas en orden. Estos empresarios han hipotecado su vivienda, han perdido parte o la totalidad de sus ahorros durante estos meses para no endeudarse más, y ahora se quedan sin el dinero que se les había prometido por haber cumplido la Ley de morosidad y no haber dejado facturas pendientes a más de un mes. Es tan grave como incoherente». destacó el presidente de la Confederación Empresarial de Hostelería de España, José Luis Yzuel.
«Hemos reclamado por activa y por pasiva en todos los foros, y al Gobierno, que se revise este criterio. Dicen que hay que poner límites, pero lo cierto es que los límites deberían estar en la caída de facturación y no en quitar el derecho al hostelero que se ha quedado sin ahorros de acceder a las subvenciones», subrayó el presidente de la confederación hostelera.
Los comerciantes y los transportistas solicitan ayuda
En el caso del comericio, la crisis de la pandemia ha castigado al sector de forma muy pronunciada. Ya venía de una situación delicada, pero el COVID-19 fue el causante de unas caídas intensas de la facturación de los diferentes negocios que forman el sector.
«Muchos pensaban que iban a recibir una mínima compensación por todo lo que han perdido y ahora se suma una condición más a la larga lista de trabas que ya venían imponiéndose desde febrero. Esto, vuelve a mostrar una falta de empatía y un desconocimiento manifiesto del sector por parte de la Administración. Las ayudas se lanzaron hace meses y estamos a mitad de julio y casi ningún comerciante ha cobrado. Los cambios de criterios y la inseguridad jurídica la están pagando los pequeños comercios que no pueden más y cierran. Que tomen ya las medidas oportunas para rescatar al sector y que las apliquen de una vez», subrayó Carlos Moreno, portavoz de CEC -Confederación Española del Comercio-.
«Estas ayudas se han enrevesado sin necesidad. En muchos países se han pagado las compensaciones directamente a los empresarios sobre una parte de su caída de facturación, sin necesidad de justificar facturas ni mucho menos tener pagos pendientes. Aquí, ha pasado un año y medio y no llega nada. La situación es indignante,» añadió Moreno.
Por otro lado, los transportistas viven una situación similar a los taxistas y muestran su indignación por la escasez de ayudas a las que han podido acceder desde el sector.
«No hemos tenido acceso a las ayudas directas. Ni a estas subvenciones, ni a prácticamente nada. Las condiciones que se pusieron sobre la mesa, no las cumplíamos. Quizás algunos negocios pudieron acceder a los ERTE, pero en cualquiera de los casos, ninguna medida económica ha beneficiado especialmente al sector del transporte«, explicó José Carlos López, vicepresidente de FETRANSA -Federación Nacional de Transporte por Carretera-.
